La Vaca Loca se Reinventó con su Market Gourmet
En esta pandemia la palabra “reinventarse” parece trillada, pero es una realidad que se presenta como reto para miles de empresarios gastronómicos que luchan por sobrevivir; precisamente, un claro ejemplo es el restaurante La Vaca Loca dirigido por el chef corporativo Hugo de Armero.
Hugo conoce bien la cocina de los hoteles y el manejo de costos, y como todo buen “mago” de la sazón a la hora de la multiplicación de los panes y los peces, hace malabares para pasar la linea roja. Es así que nace el market gourmet donde se puede encontrar diferentes cortes de carne empacadas al vacío que son parte de la carta del restaurante, y del deleite de asiduos comensales llevados por la tentación del pecado carnal.
Anticuchos, mollejas y chunchules, se lucen en la pequeña tienda junto a diferentes productos que no pueden faltar en una parrilla que intente ser sabrosa.
La cuarentena los golpeó como a muchos, y de los 4 locales que tenían ahora solo permanece el de Santa Cruz 900 en San Isidro. Se respeta el distanciamiento entre las mesas y los protocolos de bioseguridad, con atención de lunes a domingo.
“A la brasa” fue la opción que surgió durante la pandemia y ha dado buenos resultados como una alternativa extra, comenta el chef.
“Los clientes están regresando…vamos a volver a sacar una carta nueva y nuevos productos en nuestro market”, dijo Hugo de Armero quien no ha hecho un recorte de carta, sino por el contrario viene batallando hasta el final.