La disputa por la ruta Hiram Bingham —que conecta el pueblo de Aguas Calientes con el Santuario Histórico de Machu Picchu— escaló a su punto más crítico.
El alcalde provincial de Urubamba, Ronald Vera Gallegos, denunció que la empresa Consettur estaría operando de manera ilegal desde septiembre y que, solo durante los cuatro meses del plan de contingencia, habría acumulado más de S/10 millones.
Además, señaló que el caso ya fue puesto en conocimiento del Ministerio Público, acusando a Consettur de presuntos delitos de enriquecimiento ilícito y obstaculización de trámite administrativo.
AMENAZA DE CIERRE DE MACHU PICCHU
En el mismo diálogo, el alcalde advirtió que, si la situación no se corrige, podría cerrar Machu Picchu durante uno o dos meses a partir de enero de 2026, lo que paralizaría por completo la actividad turística más importante del Perú.
“No podemos permitir que una empresa monopólica gane más de 10 millones en cuatro meses mientras Urubamba es perjudicada. Si es necesario, paralizaremos uno o dos meses”, afirmó.
Vera también indicó que los buses de San Antonio de Torontoy —habilitados por el plan de contingencia— no están operando porque “Consettur no quiere retirar sus unidades”.
PLAN DE CONTINGENCIA ESTANCADO
El plan especial para concesionar temporalmente la ruta vence en un mes, pero no presenta avances. El burgomaestre aseguró que el lunes el Sernanp debía entregar la compatibilidad técnica.
Sin embargo, un oficio oficial (N.° 674-3035) del Sernanp, afirma que la solicitud de Urubamba es incompleta, carece de información técnica clave y debe ser corregida antes de cualquier evaluación.
El Sernanp señala que la municipalidad no incluyó infraestructura esencial para una concesión de 10 años, como maestranza, surtidor de combustible, energía eléctrica y estacionamientos.
Por otro lado, Vera también responsabilizó a la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) por la falta de avances, señalando que “ha sido un obstáculo” cuando intentó reunir a ambas empresas.
MACHUPICCHU PEUBLO RESPONDE
El anuncio del cierre provocó un fuerte pronunciamiento de la municipalidad distrital de Machupicchu Pueblo, encabezada por el alcalde Elvis La Torre, quien acusó a Vera de actuar con “desconocimiento, desesperación y búsqueda de protagonismo político”.
La comuna distrital advirtió que cerrar Machu Picchu afectaría de manera inmediata a hoteles y hospedajes, restaurantes y comercios, transportistas y guías, artesanos y trabajadores del turismo, así como a la economía regional y nacional.
“Una declaración así genera alarma internacional y puede reducir la llegada de visitantes”, señaló La Torre, quien incluso advirtió que podrían denunciar a Vera ante la Fiscalía de Prevención del Delito si insiste en esta medida.
A tres meses del plan de contingencia, la ruta de acceso a la maravilla mundial continúa sin un proceso de licitación claro, con dos empresas enfrentadas, un alcalde provincial bajo críticas y un distrito turístico que exige responsabilidad.