Finalmente, en todo el mundo estamos viendo cómo el Turismo va recuperando sus niveles de actividad. De acuerdo con la Organización Mundial del Turismo (OMT), los motores de esta recuperación son el progreso en el proceso de vacunación y la reapertura de las fronteras. ( OMT, oct. 21). Los valores de movimiento de turismo internacional son alentadores, aunque lejos de alcanzar los niveles pre-pandemia. En julio de 2021, 54 millones de turistas cruzaron fronteras a nivel global, representando un 67% menos que el mismo mes del 2019.
«Más del 50% de los destinos están flexibilizando las restricciones de viaje pero mayormente son las economías desarrolladas. El 43% de los destinos a nivel global continua cerrado al Turismo.»
Más del 50% de los destinos están flexibilizando las restricciones de viaje, observándose una diferencia interesante: el 79% de las economías desarrolladas ya las han flexibilizado mientras que solamente el 47% de las economías emergentes lo ha hecho. Por otro lado, todavía el 43% de los destinos globales continua con sus fronteras cerradas completamente al Turismo.
Sin embargo, esta recuperación es desigual en el mundo. En Europa, por ejemplo, mientras que los destinos nor-europeos están casi recuperados en los que respecta a sus segmentos de turismo recreacional, el sur de Europa aún está sufriendo el efecto de las restricciones de viaje. ( STR, Data Insights blog, 1-10-21). Vemos además que la modalidad de Turismo también es un factor para considerar, dado que principalmente la motivación de viaje es recreacional. No sorprende entonces que los mercados de sol y playa estén liderando la recuperación a nivel global. (STR, Data Insights blog, 1-10-21). Según lo publicado por Infotur Latam (12-10-21), al Caribe le va mejor que al resto del mundo en lo que respecta a la recuperación de la actividad turística.
«La flexibilización de las restricciones de viajes para turistas vacunados es un factor clave para acelerar el proceso de reactivación turística.»
¿Qué es lo que impide una reactivación más rápida? La OMT sostiene que las reglas y regulaciones inconsistentes entre países y las diferentes tasas de vacunación afectan la confianza en viajar, siendo la flexibilización de las restricciones de viajes para turistas vacunados un factor clave para acelerar el proceso. El interés y deseo de viajar continua, siendo las trabas y barreras burocráticas y la falta de un estándar global de requisitos de viajes los factores clave que lo impiden. (Barómetro de la OMT, Vol. 19-5, septiembre 2021).
También para STR (2021), las barreras impuestas para viajar son el principal factor que influye en la decisión de no realizar un viaje turístico. Entre las principales barreras identificadas, las tres más significativas son a) las restricciones gubernamentales, b) La incomodidad generada por las cuarentenas y c) la incomodidad que generan otros viajeros que no cumplen con las reglas sanitarias. La preocupación de contagiarse del Covid-19 se encuentra recién en el quinto lugar. Es decir, los viajeros anteponen su comodidad a la seguridad sanitaria al momento de decidir un viaje. El mismo estudio identifica, sin embargo, diferencias entre viajeros. Los norteamericanos y británicos son más sensibles a la confortabilidad y bienestar durante el viaje mientras que los europeos en general, al tema sanitario. (STR, Data Insights blog, 19-8-21).
¿Cuál es el impacto de la flexibilización de las restricciones de viaje en la recuperación del Turismo?
Habiendo identificado las principales barreras que impiden una recuperación rápida (que era lo esperado inicialmente dada la capacidad altamente resiliente del Turismo demostrada en crisis anteriores), nos propusimos validarlo analizando qué está pasando en diferentes latitudes. He aquí los resultados.
Primero, empezamos por casa. Revisemos la situación en Perú. El siguiente gráfico muestra la evolución de arribos internacionales para el período enero 2020 – agosto, 2021 (MINCETUR). La metodología utilizada fue el análisis de números índices, comparando la cantidad de arribos internacionales de cada mes del periodo considerado con el mes similar del 2019. Por ejemplo junio 2021 vs junio 2019.
Observamos entonces claramente el decisivo impacto del cierre de fronteras a partir del 15 de marzo de 2020 con la abrupta caída de los arribos internacionales, el que se mantiene en nivel cero por seis meses. A partir de octubre de 2020 se empiezan a autorizar ingresos del extranjero, pero con fuerte regulación y control. La recuperación es mínima hasta que se produce una ligera flexibilización de restricciones en diciembre. Las restricciones se endurecen con la segunda cuarentena en febrero de 2021 pero esta vez no implicó un cierre total de fronteras. A partir de que finaliza la Segunda Ola, se empiezan a flexibilizar nuevamente algunas restricciones y por lo tanto notamos una lenta recuperación de la actividad turística internacional de manera sostenida, la que llega a un máximo de 0.11 en agosto, 2021, u 11% de la actividad “normal” para ese mes respecto a 2019.
¿Qué significa esto?
En primer lugar, que la tendencia de recuperación en Perú es lenta, no vemos un crecimiento acelerado como se esperaba y, en segundo lugar, que hay mucho por recuperar para llegar a la línea de base, lo que señalaría que se alcanzaron los niveles pre-pandemia.
Definitivamente, algo está afectando la capacidad de reactivación. Además, podríamos decir que no hay perspectivas de cambio, dado que luego de un breve periodo en el que se eliminó el requisito de PCR para viajeros vacunados, se dio marcha atrás, siendo hoy en día un requisito de ingreso y, por lo tanto, una traba más al momento de considerar un viaje.
«Algo está afectando la capacidad de recuperación del turismo internacional en Perú y todo indica que podría ser el nivel de requerimientos para visitarlo.»
¿Y que pasó con el Turismo Interno?
En este caso la variable seleccionada fue: Huéspedes nacionales. Es decir, los viajeros internos que pernoctaron en algún tipo de establecimiento pago (MINCETUR). Utilizando la misma metodología, esto es lo observado:
Definitivamente, la recuperación del Turismo interno va mucho mejor que el Internacional. Nada sorprendente y además, coherente con lo que se está viendo en otras partes del mundo. Fuerte impacto al inicio, pero menos que en el ámbito Internacional y luego, una rápida recuperación desde abril 2020 hasta diciembre. Aquí si podemos comprobar una rápida reacción del mercado una vez que se levantan restricciones.
El impacto de la Segunda Cuarentena no se hizo esperar y otra vez, caída y una rápida recuperación con el inicio de lo que parece ser un ciclo estacional. Al final de cuentas, el índice de recuperación del Turismo Interno a junio 2021 es 0.74, mucho más cerca de la línea de base y de la tan ansiada “normalidad”. No es menor señalar que el pico se alcanzó en abril (0.88) para caer un 16% entre abril y junio que podría ser explicado por factores exógenos, como la situación política y crisis económica.
«La recuperación del Turismo Interno en Perú va mejor que la del Internacional y muestra un comportamiento similar al de otros destinos, aunque con señales de que existen otros factores que lo afectan, como posiblemente la crisis política y económica.»
¿Qué nos indican estos comportamientos?
Que no estamos frente a un problema de falta de demanda, sino de barreras al viaje turístico. En cuanto las restricciones se flexibilizan, la demanda se dispara.
«En Turismo Internacional no nos encontramos frente a un problema de falta de demanda, sino de barreras a la realización del viaje turístico que influyen al momento de elegir un destino.»
La pregunta lógica que nos hicimos a continuación fue ¿Es el comportamiento de Perú algo estándar a lo que ocurre en otras partes del mundo? ¿Vamos más lento, rápido o igual que otros destinos? Para ello realizamos un análisis de esta reactivación a partir de los arribos internacionales en destinos con diferentes niveles de restricción de viaje. La OMT clasifica las restricciones de viaje en estos cuatro niveles:
- Cierre total de fronteras
- Cierre parcial de fronteras
- Otras medidas: visa, testeo, cuarentena.
- Abierto para turismo internacional
Según el Recovery Tracker de la OMT, Europa mediterránea y del Sur está al 6% de nivel de cierre de fronteras, el Caribe al 11% y, América del Sur al 46%. Miramos entonces a estas regiones y los destinos seleccionados fueron España, República Dominicana y, como competencia regional: Colombia y Chile. En la siguiente tabla se observan los diferentes niveles de restricciones al viajero internacional de cada uno.
Primero veamos cómo ha evolucionado la variable “arribos internacionales” en cada destino a partir del último mes normal, febrero 2019 y aplicando la metodología de números índices. Este es el panorama.
La línea de base, señala los valores a febrero de 2019 y la curva de cada destino, la variación medida en números índices respecto a ese mes.
Observamos en todos los casos el mismo efecto inicial: caída abrupta al implantarse las cuarentenas y cierre de fronteras. España muestra las primeras señales de reactivación con el inicio del verano del 2020, básicamente impulsada por el turismo regional y local para luego, ante la falta casi total de viajeros corporativos, volver a caer de manera sostenida hasta febrero del 2021. En mayo 2021 finaliza el Estado de Emergencia Sanitaria y se comienza a flexibilizar el ingreso de turistas extranjeros y el índice mejora rápidamente y luego de manera acelerada a partir del 1 de julio de 2021, en que entró en aplicación el Certificado digital Covid para la Unión Europea significando que los turistas vacunados no requieren de testeos ni realizar cuarentenas. Para julio de 2021, se había vuelto a alcanzar un nivel de turistas del último mes pre-pandemia y para agosto, superarlo, 15 meses después del evento detonante.
A primera vista, el ganador del grupo es República Dominicana. Luego de una relativamente corta cuarentena y cierre de fronteras, sus requisitos de viaje fueron mucho más leves que en los demás destinos, complementando con una agresiva campaña de vacunación, especialmente en las zonas turísticas como Punta Cana, a efectos de brindar seguridad en el viajero. La recuperación del turismo comienza aceleradamente en junio 2020, se suaviza hasta septiembre, se acelera en noviembre con el inicio de la temporada alta para estabilizarse en una suave curva de crecimiento sostenido y llegar muy cerca del número base en agosto de 2021( índice 0.87).
«En la región. el líder relativo en reactivación turística es Colombia. Perú y Chile, se encuentran rezagados.»
En la región, el líder relativo en reactivación es Colombia. Con un nivel de restricción menor que la de sus países competidores, a partir de septiembre 2020 empieza a mostrar niveles de reactivación, encontrándose , a julio de 2021, en un nivel de 0.44 del valor normal. Bajo, pero muy por encima del grupo rezagado que lo sigue: Perú (0.11) y Chile (0.00).
De estos dos, Perú va mejor dado que empezó a flexibilizar sus restricciones de viaje antes que su país vecino del sur, el que mantuvo sus fronteras cerradas hasta septiembre 2021, luego de un política férrea de aislamiento.
Llegado este punto, nos cuestionamos si hubiera alguna diferencia de resultados no al comparar la evolución respecto al último mes normal sino, tomando en cuenta la estacionalidad, realizando el análisis respecto al último mes normal comparable pre-pandemia. Y eso es lo que hicimos y que podemos ver a continuación.
El cambio más significativo en los resultados corresponde a República Dominicana que ya ha alcanzado valores pre-pandemia en la comparación mes-a-mes, es decir, los arribos internacionales de agosto 2021 han sido mayores que los de agosto 2019. Les tomó 18 meses para alcanzar la “normalidad”. Claro está, nada garantiza que la mantenga, pero definitivamente es un ejemplo del impacto de flexibilizar restricciones de manera temprana. La curva de reactivación es sostenida y relativamente acelerada al compararla con los demás destinos.
«República Dominicana ha alcanzado valores de arribos internacionales superiores al mes similar pre-pandemia en 18 meses.»
España claramente, esta aún lejos de la normalidad, con un índice del 0.50 aproximadamente a agosto 2021, estando a mitad de camino, pero mostrando claros signos de reactivación rápida desde abril 2021 y una aceleración a partir de junio. (Fecha de implementación del Certificado Digital UE Covid).
«En España, la implementación del Certificado Digital UE Covid marcó un punto de aceleración de la recuperación de la demanda turística internacional.»
Colombia sigue siendo el líder regional con un comportamiento positivo desde septiembre 2020. Perú y Chile, siguen siendo los rezagados y no muestran variaciones significativas.
¿Qué aprendizajes nos deja este juego de análisis analítico?
Pues, veamos:
a. Levantadas las restricciones, la demanda crece en todos los casos.
b. Está claro que el tema de la reactivación turística no es un problema de demanda ni de precios ni de temor al contagio, sino de restricciones al viaje.
c. El ritmo o velocidad de recuperación no es homogéneo entre destinos. De los cinco analizados, tres muestran un comportamiento esperado de reactivación rápida y dos, no.
d. Los tres destinos que muestran mejores curvas de reactivación tienen en común que no exigen pruebas PCR a viajeros vacunados.
e. Perú y Chile son, del grupo seleccionado, los dos destinos con restricciones más altas pudiendo esto explicar el comportamiento en sus curvas de recuperación de demanda.
f. Inferimos que existen otros factores que están influyendo en la reactivación turística de Perú y Chile, lo que abre la oportunidad para otras investigaciones.
g. El Turismo doméstico, al menos en Perú, se está reactivando mucho más rápido que el Internacional. Coincidentemente, existen menos barreras o restricciones al desplazamiento interno. El resultado es congruente: a menores barreras, mayor cantidad de viajes.
h. El viajero internacional es más sensible a la incomodidad que le generan las restricciones de viaje que a otros factores y, parecería ser que su decisión de viaje está fuertemente influenciada por esto, prefiriendo destinos que le generen menor sacrificio.
i. Las economías desarrolladas están abriéndose al turismo internacional más rápido que las emergentes. Siendo estas en general mercados emisores y estando los mercados receptores restringidos o parcialmente cerrados, es probable que veamos un resurgir del turismo entre economías desarrolladas en el corto plazo y un cambio de sentido – al menos temporal – de los flujos turísticos.
j. Los destinos cuyo producto turístico es masivo (como “Sol y Playa”) están mostrando índices de recuperación mejores al flexibilizar las restricciones. Esto plantea un desafío de marketing turístico para aquellos destinos cuyo posicionamiento es más especializado o de nicho dado que podrían ser segmentos de mercado que tarden en reactivarse.
«Exigir tests a viajeros internacionales vacunados parecería ser un factor determinante en el ritmo de reactivación turistica.»
De todas las restricciones, el requisito de testeos ( PCR, Antígenos u otro) parece ser un factor determinante, mucho más influyente que la obligación de aceptar la geolocalización o llenar formularios con datos personales. Esto se evidencia en los resultados observados en los destinos que ya no los exigen a los viajeros vacunados.
La interrogante es entonces, ¿por qué exigirlo? ¿Cuál es el riesgo incremental de aceptar a un viajero vacunado sin un test para la salud pública del destino? ¿Está estudiado? ¿De qué factor depende, si es que lo hubiera? Definitivamente son preguntas que un experto en esas materias debería abordar. Porque de no existir un fundamento científico, estamos sacrificando una industria que ha sido el motor de muchas economías, fuente de sustento de miles de personas y principalmente, de unión y paz entre los pueblos.